En el año 2002 se inició en América la Propuesta Socioeducativa “Educar en Tiempos Difíciles”, con el compromiso de promover una educación de calidad, humanizadora y transformadora, para todos y todas, inspirada en el pensamiento pedagógico povedano.
A partir de ese momento muchas fueron las iniciativas y actividades desarrolladas en cada país donde está presente la Institución Teresiana, orientadas a revisar y actualizar los marcos pedagógicos, así como a crear nuevos programas y acciones teniendo en cuenta el contexto actual y las líneas estratégicas de la Propuesta. A la vez se fue generando la construcción de un Movimiento de Educadores y Educadoras.
Presentación
Cuando Pedro Poveda, un joven sacerdote, lleno de sueños y entusiasmo, empezó su acción evangelizadora en las cuevas de Guadix en los inicios del siglo pasado, no podía imaginar el desarrollo futuro de sus intuiciones y búsquedas.
A lo largo de su vida, estas primeras ideas, estos primeros proyectos orientados a articular evangelización, educación y promoción social, fueron madurando, adquiriendo distintas concreciones y desarrollos. Sus sueños, proyectos y acciones, semilla sembrada en tierra buena ha dado muchos frutos. Porque cuando la semilla cae en cada pedazo de tierra que la acoge, se hace una con ella y, sin perder su identidad más profunda, adquiere al germinar la riqueza de la tierra en que ha sido sembrada.
La intuición profética de Pedro Poveda que nace de la realidad de Guadix, y de la mirada ancha y profunda a la sociedad de su tiempo desde las montañas de Covadonga, es semilla, y punto de referencia fundamental para la elaboración de lo que hoy llamamos la propuesta socioeducativa de la Institución Teresiana.
“Yo que tengo la mente y el corazón en el momento presente”
“Yo quiero, si, vidas humanas”
“Humanismo verdad”
“Estima la justicia tanto como la vida” “Dadme una vocación y yo os devolveré una escuela, un método y una pedagogía”
“Con el espíritu pongo yo la ciencia y considero que espíritu y ciencia es la forma sustancial de la Institución”
“Hasta que Cristo se forme en vosotros”…
Invito a cada uno, a cada una, a cada educador, a cada educadora que realiza su tarea educativa disperso como la sal al estilo de los primeros cristianos, a los equipos que en contextos diversos ponen sus energías en crear ambientes educativos donde las personas crezcan, a que continúen esta enumeración. A ponerse de nuevo, en este momento de encrucijada, en la escuela de Poveda dejando que nos hable al corazón, y podamos escuchar las palabras capaces de hacer brotar cada día, en las situaciones alegres y difíciles, la luz y la fuerza que nos sostiene en la tarea cotidiana de atreverse a educar.
Han pasado cien años... Entramos en un nuevo milenio. La semilla lanzada en Guadix hoy está presente en distintas par-tes del mundo. En Europa, América, Africa y Asia. En diferentes países, pueblos y culturas. En cada una de estas realidades es generadora de vida, de mucha vida, de mucho dinamismo y generosidad en la continua búsqueda de proyectos y acciones que articulan evangelización, educación y promoción social.
Hace prácticamente 75 años, en 1928, esta semilla fue sembrada en América.. Primero en Chile, y poco a poco germinó y creció en distintos países. Hoy está también presente en Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Estados Unidos, Guatemala, México, Perú, República Dominicana, Uruguay, y Venezuela En cada país fueron apareciendo y se han ido desarrollando distintos proyectos socieducativos por ella inspirados. En el ámbito de América Latina se va tejiendo una verdadera red de experiencias y proyectos, animados durante años por el Consejo de Cultura de la Institución Teresiana, y se construyen espacios de intercambio, profundización y apoyo mutuo. La con-ciencia de que unidad y diversidad se exigen mutuamente se va haciendo cada vez más fuerte y comprometida.
Es tiempo de cosecha. De dejar que la semilla vuelva a penetrar con su fuerza transformadora y movilizadora nuestras mejores energías de vida. Los distintos equipos se dejan interpelar. En Cochabamba (Bolivia), en unas jornadas pro-movidas por el Consejo de Cultura en 1998, surge la idea: hemos caminado mucho, los proyectos han trabajado a fondo su identidad y especificidad. Es hora de construir conjuntamente la Pro-puesta Socioeducativa de la Institución en América Latina. Los equipos se ponen en marcha. Han sido cuatro años de intenso trabajo colectivo, en el ámbito local y de todo el continente, asesorados por personas especializadas en educación, jalona-dos por Seminarios y Congresos Educativos en distintos países. Con la eficiente y generosa aportación del Centro Cultural Poveda de la República Dominicana.
Hoy América Latina quiere ofrecer a Pedro Poveda, en el año en que celebramos el centenario del inicio de su acción evangelizadora en las cuevas de Guadix, este fruto de sus sueños, nos atrevemos a afirmar.
Esta propuesta, Educar en Tiempos Difíciles, expresión de profunda inspiración povedana, quiere ser una referencia para todos los proyectos socioeducativos, para cada educador, para cada educadora que en América Latina se compromete con la acción educativa y evangelizadora promovida por la Institución Teresiana o busca inspiración en ella. Quiere ser también una contribución al diálogo e intercambio con centros y proyectos de otros países y continentes.
Que Pedro Poveda haga fecunda la tarea educativa de cada uno de los centros y proyectos sociales del continente y nos ayude a hacer vida sus palabras:
“ Las obras sí; ellas son las que dan testimonio de nosotros y las que dicen con elocuencia incomparable lo que somos” (1919)
Loreto Ballester Reventós
Directora de la Institución Teresiana
Los Negrales, 28 de julio de 2002
Web donde se pueden descargar otros documentos de la PSE. http://pseitperu.blogspot.com.es/